El alcohol, a diferencia de otras drogas, está presente en todos los rincones de nuestra sociedad, y es socialmente aceptado y propuesto en muchas situaciones.

Tenemos que darnos cuenta de que el alcohol es una droga y la falta de control sobre su consumo provoca dependencia y adicción, que es una enfermedad muy grave que afecta a muchas familias.

Pero, ¿cuándo sabemos que hemos perdido el control?

El consumo de alcohol está presente en la mayoría de las familias, desde las reuniones hasta los actos sociales, y se considera una buena alternativa para aliviar el estrés.

Se han identificado algunos patrones en el consumo de alcohol:

• Consumo moderado - el que no causa riesgo, la persona tiene control y conoce su límite.
• Consumo de riesgo: la persona se causa daños a sí misma y a los demás.
• Consumo nocivo: la persona consume alcohol constantemente y el consumo ya está perjudicando su salud.

Los estudios demuestran que el alcoholismo es una enfermedad crónica que tiene factores genéticos, psicosociales y ambientales.

Al ser una droga legal, es muy fácil acceder a ella y el salto del placer a la adicción es peligroso.

Las personas que consumen alcohol lo utilizan como forma de relajarse tras un día estresante o en actos sociales con amigos.

Hay personas genéticamente predispuestas a la adicción que, si consumen grandes cantidades, acaban perdiendo el autocontrol.

¿Cómo saber si eres dependiente?

• Sentir la necesidad de beber en un corto espacio de tiempo.
• Enfadarse cuando no hay alcohol disponible.
• Almacenar alcohol en muchos lugares de la casa.
• Sensación de temblor, náuseas, cuando no se come durante mucho tiempo.
• No poder limitar la cantidad de alcohol consumido.
• Cuando el consumo de alcohol perjudica las relaciones con la familia, el trabajo y los amigos.

El tratamiento de los drogodependientes lo lleva a cabo un equipo de profesionales como psiquiatras, psicólogos y terapeutas.

El drogadicto debe querer recibir tratamiento, el deseo de cambiar es suyo, reconocer que está enfermo es el primer paso hacia este cambio.

El apoyo de la familia y los amigos también es importante para el éxito del tratamiento, pero depende del adicto ver el problema.

Sepa que usted es el protagonista de su vida, recibir apoyo siempre vale la pena, pero sólo usted puede cambiar su historia.