Sabemos que no es tan fácil enfrentarse a una entrevista de trabajo porque se trata de una nueva experiencia laboral. A menudo nos sentimos ansiosos, inseguros y este comportamiento es natural, pero no debemos dejar que el miedo y la ansiedad se interpongan en este momento. Cuando vemos que existe la posibilidad de un trabajo que nos interesa, debemos estar dispuestos a demostrar que somos un candidato adecuado para el puesto.  

Hoy en día, existen entrevistas en línea y entrevistas cara a cara. Si opta por las entrevistas en línea, asegúrese de que su conexión a Internet es buena, de que su ordenador o teléfono móvil funcionan correctamente y de que la sala es silenciosa.

¿Cómo?

• Conozca el sector de actividad de la empresa.
• Lo que produce;
• Dónde trabaja.
• Ya sea nacional o multinacional.
• Dónde está su sede.

Habrá un momento en el que el entrevistador pedirá al candidato que cuente un poco de su historia, para conocer mejor a la persona que opta al puesto, así que cuenta un poco quién eres, de dónde vienes y tus objetivos profesionales, no te extiendas mucho con las descripciones, porque puede cansar al entrevistador, cuenta lo realmente importante, siendo objetivo y claro.

Puede que se lo pregunten:

• ¿Por qué debería contratarte la empresa?
• ¿Qué sabe de la empresa?
• ¿Qué se ve haciendo dentro de tres años o más?

Por eso mencionaba antes lo importante que es conocer bien la empresa para tener respuestas en el momento de la entrevista.No te sientas inferior a otros candidatos que puedan tener más experiencia que tú, demuestra que tienes ganas de trabajar, que quieres crecer profesionalmente y preferiblemente en la empresa en cuestión y que estás decidido a formar parte del grupo siendo un buen colaborador.

Si no tienes un título académico o todavía eres estudiante, diles lo centrado que estás, lo decidido que eres y que tienes potencial para implicarte y darlo todo en el trabajo. Si tienes una buena experiencia previa, esto también es importante para conseguir el puesto. Un factor fundamental en una entrevista de trabajo es tu forma de vestir. Si es posible, antes de la entrevista, infórmate de cómo visten los empleados de la empresa y luego vístete como si ya trabajaras en ella. No te avergüences si no entiendes una pregunta durante la entrevista, pide al entrevistador que te repita la pregunta para entenderla mejor y poder responder con claridad.

Y por último, si no te contrataron para un puesto en la empresa, no significa que seas incapaz o un mal profesional, pero entiende que en ese momento eras el más adecuado para el puesto. Esfuérzate siempre por ser un buen profesional mejorando tus conocimientos y seguro que conseguirás un gran trabajo en el que disfrutarás desempeñando las funciones que te encomienden.

Buena suerte.