Hay momentos en nuestra vida en los que pasamos por situaciones difíciles, que nos hacen parar y simplemente reflexionar sobre lo que estamos viviendo y nos damos cuenta de que hay un espacio vacío en nuestro interior, como si nos faltara algo para complementarnos.

Por lo general, este vacío emocional es el resultado de alguna pérdida en nuestras vidas, alguna decepción con alguien a quien admiramos mucho, alguna dificultad, falta de amor y afecto, entre otras situaciones.

El impacto tanto de las pérdidas como de las decepciones puede causar un sufrimiento tan grande que en muchos casos la persona abandona el lugar y se aísla de su familia, amigos, trabajo y vida social.

Te sientes triste y crees que sería mejor aislarte para experimentar tu tristeza. No te das cuenta de que el aislamiento puede aumentar el vacío y la tristeza en tu interior.

Pero, ¿cómo superar este vacío emocional?

• Antes de tomar ninguna medida, necesitas saber qué es lo que realmente ha desencadenado este sentimiento de tristeza;
• Encontrarte a ti mismo y darte cuenta de cuánto más grande eres que cualquier situación y de que eres capaz de superar las dificultades que experimentas en tu vida;
• Aléjate de todo lo que te hace daño y ya no es importante para ti;
• Rescata tu amor propio;
• Si es necesario, acuda a terapia para que le ayuden a tratar su salud mental;
• Reevalúa tu vida y las personas que participan en ella, para darte cuenta de qué y quién tiene realmente sentido que te acompañe en tu viaje;
• No te fijes en lo que salió mal, en las decepciones que tuviste, en las pérdidas. Fíjate en lo que salió bien y sigue ese camino, porque es a partir de ahí cuando todo vuelve a empezar;
• Hazte preguntas como ¿Qué he hecho para valorarme? ¿Qué es lo que más me satisface? ¿Qué es lo que más me gusta hacer? ¿Quién soy realmente?
• Concéntrate en lo que te conviene y valora siempre tus virtudes;
• No dejes que los errores de los demás te afecten;
• Despréndete de lo que te hace tanto daño y te entristece, date cuenta de que cierto tipo de cosas ya no encajan en tu vida;
• Entiende que la perfección no existe en nadie, somos seres humanos que podemos cometer errores y aciertos, así que aprende de tus errores y valora tus aciertos;

Mientras vivas, lo único que tienes que hacer es quererte y apreciarte. Si en algún momento de tu vida necesitas salir de escena para reflexionar y evaluar los acontecimientos, no tengas miedo. Sí, sal de escena y haz balance de tu vida, para que puedas comprender lo que ocurre de forma más consciente y obtener resultados óptimos en la resolución de cualquier problema.

Tanto los buenos como los malos momentos te servirán de escuela para fortalecer tus emociones y tu forma de ser y vivir la vida.

¡¡¡Cuídate siempre!!!