Nuestra vida está hecha de buenos y malos momentos, alegrías y tristezas, es parte de nuestra experiencia pasar por situaciones así. Por eso es súper importante tener algo que nos motive a seguir adelante y enfrentar situaciones difíciles. Seguramente hay alguien en tu vida o en algún lugar  que te inspira a vivir mejor y creer que es maravilloso estar aquí experimentando momentos de gran satisfacción y paz.

Pero, ¿sólo puedo estar bien en este universo si tengo algo, alguien o algún lugar que me inspire?

La respuesta está dentro de ti. No hay ninguna regla ni concepto preestablecido, porque tu inspiración puedes ser tú mismo, de hecho tú eres tu mejor inspiración, sólo tienes que mirarte a ti mismo y darte cuenta de que tu luz interior sólo estará encendida si tú lo permites. Las personas pasan por nuestra vida y si nos han hecho bien, ciertamente tenemos que estar agradecidos por cada momento feliz que hemos vivido y tú también puedes haber servido de inspiración a otros, es un intercambio muy bienvenido, porque sólo contribuye a nuestro proceso de evolución positiva en nuestro universo interior.

La vida es magnífica y cuando está llena de inspiración y también de reflexión, todo tiene color y encanto y así nos permitimos ser felices. Cree siempre que hay una razón para que estés aquí, que tu vida tiene sentido. Un buen ejemplo de lo que digo es sentir amor. El amor es la mayor fuente de inspiración que puedes tener, porque te motiva cada día de tu vida a ser lo mejor que puedes ser para ti y también para los demás. Sólo el amor puede sacar lo mejor de ti, por eso es tu mayor inspiración.

Has nacido para ser feliz, no malgastes tu vida en cosas insignificantes, aprende de tus errores e inspírate en lo que te hace pleno y feliz. Permítete vivir y agradéceselo a tu vida.